¡Las vacaciones tan esperadas al fin han llegado! Ahí vienen las tan deseadas semanas, ya que partir de vacaciones es sinónimo de escapar de la agitada rutina diaria. Quedan por resolver algunos pequeños detalles antes de irse de vacaciones, por ejemplo, el riego de las plantas. . ¿Cómo conseguir que las flores, las frutas y las hortalizas, así como el césped y los setos se conserven en buena forma después de varias semanas sin riego?
La regla fundamental: riega abundantemente antes de salir de vacaciones. La mayoría de las veces, las plantas superan tu ausencia de un fin de semana sin ningún problema. ¿Tienes previsto estar fuera durante varias semanas? En tal caso, el método más práctico consiste en pedirle a tus vecinos o a tus padres que rieguen a tus adoradas plantas durante tu ausencia. Como agradecimiento, puedes ofrecerles una parte de tu cosecha o sorprenderlos invitándolos a comer en tu casa. Sin no encuentras a nadie a quien confiarles tus plantas, te recomendamos las soluciones siguientes.
Riego
Seguramente ya conocerás este truco, ya que es muy recomendado y da resultados: la botella invertida. Basta con abrir un pequeño agujero en el tapón, llenar la botella de agua y clavarla bocabajo en la maceta. Por efecto de la presión atmosférica, el agua saldrá lentamente y mantendrá un nivel constante de humedad en la tierra. Las botellas de vidrio de cuello largo y estrecho son particularmente adecuadas. Se hunden fácilmente en la tierra y son especialmente estables y duraderas. ¿No tienes una botella de vidrio a mano? No hay problema, el sistema funciona igualmente bien con una botella de plástico. Usando una aguja, perfora cuidadosamente el tapón, desde el interior al exterior, para que la botella no se vacíe demasiado rápido.
Otro método consiste en la utilización de un hilo grueso o una mecha de algodón: fija el hilo o la mecha en el fondo de un cubo y coloca el otro extremo en la tierra. Asegúrate de colocar el cubo a unos 30 cm por encima de la planta. El hilo transportará el líquido hasta las raíces
Riego
Regar suficientemente las plantas en macetas y cajoneras de cultivo en la terraza o en el balcón antes de salir de vacaciones.
Garantiza una buena base usando tierra hidrorretenedora para macetas. Los mantillos especiales para plantas de balcón y en cajoneras de cultivo almacenan el agua de riego y la liberan progresivamente a las plantas en función de las necesidades de estas. Así pues, la tierra se seca mucho más lentamente.
Para un periodo corto, es suficiente con colocar las plantas muy juntas, las unas al lado de las otras, en un lugar sombreado, por ejemplo, contra el muro norte de la casa. Si bien es cierto que no se desarrollan tan bien en un espacio reducido, esto evitará que se sequen. Coloca platillos debajo de las macetas y llénalos de agua antes de partir. No te aconsejamos colocar tus plantas en una bañera llena de agua, ya que el riesgo de podredumbre radicular es muy elevado debido al anegamiento.
¿Alguna vez has utilizado las cajoneras de cultivo con depósito de agua para tus plantas? ¡Es todo un lujo! Las plantas absorben automáticamente la humedad necesaria del depósito ubicado en la parte inferior de la cajonera de cultivo. Cuentan con un indicador de nivel de agua para que sepas cuándo debes llenar el depósito. Si las cajoneras se colocan a la sombra, las necesidades de agua estarán cubiertas durante aproximadamente una semana.
Si ya has planeado una ausencia más larga, ¡te vendría muy bien un sistema de riego automático! El kit de riego gota a gota Gardena para plantas en macetas se conecta a una tubería de riego o a un grifo. Se compone de cinco dosificadores ajustables, lo que permite regar las plantas en cajoneras de cultivos en función de sus necesidades.
Riego
Es particularmente en los parterres de frutales y hortalizas que resulta irritante ver marchitarse las plantas que se han cultivado tan laboriosamente, reduciéndose la cosecha a nada por el efecto de una ola de calor. Además de un sistema de riego automático, el método «Olla» ha probado ser eficaz especialmente en los macizos elevados. Como el término lo indica, se hace uso de vasijas de barro. Se necesitan dos vasijas de barro no barnizadas que se colocarán la una sobre la otra y que harán las veces de un depósito de agua.
Cierra primeramente el agujero de una de las vasijas con un pequeño mosaico o un trozo de loza.
Pega los lados abiertos de las dos vasijas, la una contra la otra, con un pegamento resistente al agua (cola de fraguado en caliente o silicona).
Entierra las dos vasijas en la tierra, de manera que el agujero libre quede al ras del suelo. Vierte agua a través de agujero que se ha dejado abierto. Seguidamente, coloca un pequeño azulejo o un trozo de loza sobre el agujero. ¡Ya tienes un depósito!
¿Pero cómo llegará el agua a las raíces? Como seguramente sabrás, la humedad se exuda a través de la estructura porosa de las vasijas de arcilla. Así pues, las plantas se irrigan de forma subterránea sin que una sola gota del precioso líquido de evapore.
Además, puedes edrar tu cajón para flores —o jardinera— y cubrirlo completamente con un manto vegetal. Preferentemente, usa una mezcla de césped cortado y otros residuos vegetales. Poco importa que el césped esté seco o húmedo. Así pues, puedes usar césped recién cortado. La hierba brinda sombra, por lo que el suelo se seca más lentamente.
Riego
En verano, la temperatura en un invernadero puede llegar fácilmente a los 40 ºC. Por lo tanto, se hace necesario abrir completamente las puertas y las ventanas. Seguidamente, hay que desplegar las cortinas o fijar cubiertas sobre el invernadero (de manera tal que el viento no se las lleve). Humedece totalmente el suelo antes de salir de vacaciones.
Riego
Son especialmente los setos recién plantados los que menos resisten a un largo periodo de sequía. Toma ciertas precauciones antes de la partida para no enojarte al regreso al encontrarte tus setos completamente marchitos. Cubre las raíces de las plantas con césped cortado, por ejemplo. El agua se evapora más lentamente bajo una capa de abrigo vegetal. El riego por goteo mediante dosificadores separados entre sí unos 30 cm impide que la tierra se seque totalmente.
Riego
La mayor parte del tiempo, nuestras superficies plantadas con césped están expuestas directamente al sol. Corta tu césped justo antes de salir de viaje y deja los residuos al sol. Riega hasta que la tierra haya absorbido la humedad a unos 15 cm de profundidad. Debido a las diferentes estructuras que pueden tener los suelos, no es posible definir un volumen preciso. Puedes medir la humedad del suelo con un aparato para tal fin. Un rociador programable suministrará el volumen de agua necesario durante tu ausencia.
La siguiente medida es radical pero eficaz: podar las plantas y cortar las flores para que tus plantas consuman menos agua. Algunas plantas volverán a florecer en verano. Idealmente, la planta ya habrá formado nuevas flores a tu regreso de vacaciones.
Como norma general, prueba los sistemas de riego automáticos antes de emprender tu viaje de vacaciones. ¿Funciona el sistema sin ningún problema? ¿El volumen de agua suministrado es el adecuado? Evita un ajuste que suponga un riego excesivo para evitar cualquier anegamiento.
Además, antes de partir, comprueba que tus plantas no padezcan ninguna enfermedad o infestación de plagas. Si así fuera, realiza el tratamiento y aísla las plantas afectadas para proteger a las otras
¡Estos trucos te permitirán regresar y disfrutar relajadamente de tu tiempo libre! ¡Te deseamos unas estupendas vacaciones!
Quizás te interesen alguno de estos productos
Otros temas apasionantes