Clásicamente, la mesa de cultivo se utiliza para cultivar diversas hortalizas, hierbas aromáticas o fresas. Pero las flores comestibles, como las caléndulas o las capuchinas, también son ideales para crear macizos elevados coloridos y pueden colocarse como pequeños puntos destacados entre los cultivos. Dado que la mayoría de las verduras, como los pepinos, los tomates, las patatas, los pimientos o las zanahorias, así como muchas hierbas, prosperan en lugares soleados, es aconsejable colocar el la mesa en un lugar soleado o parcialmente sombreado.

Básicamente, una mesa de cultivo con un llenado óptimo se compone de tres capas diferentes:

1. Capa de drenaje

2. Capa de abono

3. Capa de plantación

Estas capas se componen de diversos materiales orgánicos, como virutas de madera, compost y tierra vegetal rica en nutrientes, que se rellenan capa por capa en el la mesa. Los diferentes materiales se vuelven cada vez más finos hacia arriba. 

Los diferentes materiales de relleno contribuyen a una buena ventilación y a un suministro continuo de nutrientes a las plantas. El hecho de que los materiales orgánicos como astillas de madera y compost se descompongan constantemente en la mesa de cultivo también genera una cierta cantidad de calor debido a la descomposición . Gracias a este calor, se pueden cultivar relativamente temprano rábanos, habas, oraches, cebollas, espinacas, acelgas, zanahorias, chirivías y diversos tipos de lechugas o coles. En general, otras plantas hortícolas como tomates, patatas, pepinos o boniatos también se benefician de este tipo de cultivo y lo agradecen con una rica cosecha. 

La capa base está formada por material orgánico grueso, como por ejemplo virutas de madera. Esta capa garantiza que el exceso de agua, por ejemplo en días especialmente lluviosos, pueda escurrirse fácilmente y que tu mesa no se pudra. Esto evita el encharcamiento y la sedimentación. Las virutas de madera también inhiben el posible crecimiento de malas hierbas.

Las ramitas, las ramas o los desechos de arbustos recortados también pueden servir como drenaje. En este caso, la capa de drenaje debe cubrirse con una capa estrecha de relleno de recortes de setos, hojas y restos de arbustos. Esta capa más pequeña de relleno crea una barrera y evita que las capas superiores, más finas, simplemente se deslicen. Si utilizas pequeñas virutas de madera picadas para el drenaje, no es necesaria la formación de dicha barrera.

El compost garantiza que tus plantas de hortalizas se beneficien de un suministro óptimo de nutrientes y del calor resultante de la putrefacción. También promueve la vida activa del suelo.

Si deseas usar compost de tu propio jardín, asegúrate de que los desechos del jardín no hayan sido infestados con hongos o plagas rebeldes. Por lo tanto, las plantas que sufren de algún patógeno de la pudrición de la raíz no deben compostarse. Esto se debe a que los agentes causantes de estas enfermedades pueden sobrevivir en el compost durante algún tiempo. Si usaras estos desechos de jardín para llenar tu mesa de cultivo, los patógenos dañinos aplaudirían con alegría y se abalanzarían sobre las plantas recién plantadas.

Si no recuerdas exactamente si arrojaste algunas plantas enfermas al compost el año pasado o si el compost huele desagradablemente a podredumbre después de pudrirse, es mejor ir a lo seguro y usar solo compost de jardinería de alta calidad. 

La capa de plantación consiste en un suelo que se adapta a las necesidades de diferentes tipos de frutas, verduras, hortalizas y plantas aromáticas, por un lado, y es muy adecuado para cultivar en mesas de cultivo, por otro. Por esta razón, recomendamos nuestro substrato COMPO BIO Huerto y frutales. Gracias a su alto contenido en humus y al rico fertilizante natural, suministra a las plantas hortícolas recién plantadas todos los nutrientes importantes durante un máximo de cinco semanas, contribuyendo así a un comienzo exitoso de la temporada de jardinería. El suelo de la mesa de cultivo sin turba se basa en materias primas puramente naturales y, por lo tanto, es maravillosamente adecuado para el cultivo sostenible de hortalizas en el jardín.

Con una mini mesa de cultivo, el llenado de la mesa es un poco diferente, porque el espacio limitado no permite llenar tres capas. Por lo tanto, la atención se centra en las dos capas más importantes: la capa de drenaje y la capa de plantación. Por esta razón, los dos productos que hay que utilizar en estos casos son el COMPO BIO Substrato Huerto y frutales, que, tenemos varios tamaños que se adaptan a tus necesidades y las Virutas de madera. 

No se recomienda llenar una mesa de cultivo exclusivamente con tierra. Sin embargo, si solo quieres plantar plantas ornamentales en la mesa, puedes reducir un poco el ingenioso sistema de capas: simplemente coloca una capa de astillas de madera, esquejes de arbustos o ramitas en el suelo como drenaje, lo que garantiza la ventilación y al mismo tiempo evita el encharcamiento. Luego llena la mesa con tierra para macetas de alta calidad.

Dependiendo de las plantas ornamentales de que se trate, también puede variar aquí. Además de las tierras para macetas de aplicación universal, también existen suelos con necesidades especiales para plantas ornamentales de alto consumo con altos requerimientos de nutrientes como geranios, petunias o crisantemos.

Si tienes una mesa de cultivo muy alta, también puedes reducir la profundidad de la mesa llenando primero con piedras y grava y cubriéndola con un vellón. A continuación, puedes llenar la mesa con tierra. Asegúrate de que la capa del suelo tenga al menos 25 centímetros de profundidad para que las plantas tengan el mayor espacio posible para el crecimiento de sus raíces.