Las monsteras

Gracias a sus fascinantes hojas de un intenso color verde brillante, las monsteras realzan toda la casa. El hábitat ideal para las monsteras es luminoso o parcialmente sombreado, resguardado de la radiación solar directa. En un emplazamiento demasiado sombrío, la planta difícilmente formará la «ventanillas» que la caracterizan. Al principio, el crecimiento de las hojas jóvenes es cordiforme y sin cortes.

Por otro lado, las hojas ajadas son indicativas de una sobreexposición a la radiación solar. Una humedad relativa elevada a una temperatura ambiente de 21 ºC constituye una condición ideal. Durante el reposo vegetativo, de octubre a febrero, las monsteras se benefician de los lugares más frescos. Sin embargo, la temperatura no debe caer por debajo de los 15 ºC durante mucho tiempo en ningún caso.

Al ser las monsteras unas grandes trepadoras decorativas, prevé un espacio suficiente desde el principio para las tuyas. Por lo tanto, recomendamos su plantación en una cajonera de cultivo grande. Ya que las plantas jóvenes crecen muy rápido, asegúrate de trasplantarlas regularmente y, así, evitar que los nutrientes escaseen. Pero también hay que trasplantar las monsteras de más edad cada 2 a 3 años. El mejor momento para trasplantarlas es durante la primavera, al principio del período del crecimiento. Evita dañar las raíces aéreas de las plantas. En ocasiones, estas raíces pueden llegar a ser muy largas debido al lugar elegido y/o un insuficiente suministro de agua o de nutrientes e, incluso, debido al poco espacio provisto para la formación de los sarmientos. Las raíces aéreas de las monsteras deben suministrar un aporte suplementario a la planta, especialmente en caso de deficiencia. Lo ideal es que no se lleguen a desarrollar demasiado.

Estas plantas se benefician de un riego regular, ya que se desarrollan mejor cuando la humedad es constante. No obstante, siempre se debe evitar cualquier anegamiento. Un riego excesivo provocaría el ennegrecimiento del borde de las hojas. Puedes rociar tus plantas con agua, especialmente en condiciones de baja humedad relativa, para seguida y preventivamente limpiar las hojas con un paño húmedo. Te aconsejamos usar agua de lluvia o agua destilada a temperatura ambiente. De noviembre a marzo, reduce el riego.

Las monsteras necesitan hierro y potasio para producir hojas sanas y de color verde intenso. Por tal motivo, una fertilización semanal se hace necesaria de abril a agosto. Te aconsejamos un abono líquido para plantas verdes añadido al agua de riego. De noviembre a febrero, solo fertiliza mensualmente.